La botella de vino de vidrio al descubierto

Pou¿Por qué las botellas de vino son de vidrio? ¿Por qué existen diferentes formas? La botella de vino de vidrio que conocemos hoy en día no existe por casualidad. Todas y cada una de sus características (material, capacidad y forma) tiene una explicación.

La historia de las botellas de vidrio y el vino

En la Antigüedad, el vino se almacenaba en tinajas o bolsas de piel de buey para protegerlo del aire. Estas soluciones no eran muy prácticas. La primera ocupaba demasiado espacio, mientras que la segunda tenía capacidad para poco vino.

Ya existían las botellas de vidrio, aunque su uso se limitaba al perfume.

Sin embargo, conforme fueron evolucionando las prácticas del imperio romano, las botellas de vidrio se adoptaron para servir vino a la mesa. Aun así, las botellas no tenían ninguna solución de encorchado por lo que tan sólo se usaban para transportar el vino del ánfora a la mesa.

No es sino en 1634 cuando las botellas de vino fueron definitivamente adoptadas para conservar, transportar y servir vino. De hecho, los ingleses entendieron la influencia del contenedor sobre el vino y la necesidad de protegerlo de los rayos del sol. Además, también fue en esa época cuando el corcho empezó a cobrar importancia como solución de encorchado. La práctica se desarrolló en el siglo XVIII cuando el rey Luis XV de Francia terminó autorizando el transporte de vino en botellas (y ya no sólo en barricas).

¿Por qué las botellas tienen una capacidad de 75 centilitros?

La capacidad tradicional de las botellas de vino es 75 cl: aquí te lo explicamos.

Después de la adopción del sistema de pesos y medidas que aún hoy rige nuestro diario vivir, se presentó la necesidad de decidir el tamaño de las botellas de vino en el siglo XVIII. Había que tomar en consideración las medidas vigentes en Inglaterra, por tratarse del primer socio comercial de los negociantes de vino.

Aquí está la explicación: seis botellas de vino de 75 cl corresponden a un galón imperial.

Por eso, no sólo se mantuvo el formato de 75 cl como regla, sino que además las cajas de vino suelen contener seis o doce botellas. Sin embargo, existen otros formatos de botellas de vino, como el magnum (1,5 litro), el Balthazar (1,2 litro) o el Melchior (1,8 litro), entre otros.

¿Cuáles son las diferentes formas de las botellas de vino?

Existen siete formas de botellas de vino de vidrio diferentes:

  • la botella de vino bordelesa, cilíndrica, estrecha y con “hombros”. Se usa para los vinos de Bordeaux, y de forma más general, para los vinos del Suroeste de Francia;
  • la botella de vino de Borgoña, que se reconoce por su forma cónica y no cuenta con “hombros”;
  • la botella de vino de Loira, variante de la botella de Borgoña más delgada;
  • la botella de vino de Provenza, también conocida como flauta de corset, se usa para los vinos con apelación Côte de Provence. Los negociantes de vino prefieren la botella bordelesa;
  • la botella de Ródano, que cuenta con la mención Côtes-du-Rhône en los “hombros” de la botella de vidrio;
  • la flauta de Alsacia, que es un ejemplo de botella de vino que cuenta con protección. Es alta, delgada y elegante, y permite a los vinos de Alsacia destacar inmediatamente;
  • el clavelin de Jura es una botella dedicada al vino amarillo de Jura.

Los viticultores tienen la obligación de usar una forma de botella de vino propia de algunas apelaciones, como es el caso con los vinos de Alsacia. Las botellas de vino de vidrio que hoy conocemos son el resultado de una evolución de las prácticas y de los conocimientos en materia de enología. Hoy en día contamos con múltiples formas y dimensiones de botellas de vidrio para almacenar el vino y añejarlo.